AtuSalud. En los años 80 irrumpieron en el mercado los medicamentos biológicos, un nuevo tipo de fármacos que, a diferencia de los tradicionales de síntesis y origen químico, utilizaban organismos vivos para su desarrollo. Los biológicos supusieron un importante cambio en la forma de afrontar patologías como la diabetes, las enfermedades de origen autoinmune, el enanismo o el cáncer. A principios de la década de 2000, los medicamentos biológicos que surgieron en los 80 empezaron a perder sus patentes. De esta forma aparecieron los biosimilares: fármacos de origen biológico fabricados a partir de una ver-sión del mismo principio activo que su biológico de referencia y que han de-mostrado con éste una equivalencia en términos de eficacia, seguridad y calidad.